La renovación del Derecho obedece, la mayoría de las veces, a los cambios que atraviesan las sociedades. El legislador trata de suministrar las respuestas que las comunidades reclaman. En este sentido, uno de los capítulos de la realidad social que presenta un dinamismo frecuente lo constituyen aquellos aspectos vinculados con la estructura familiar. Al respecto se puede decir que la legislación específica procura contemplar el ritmo y el rumbo de la evolución propia de la convivencia familiar. En el supuesto de la iniciativa legal que extiende la obligación de los padres de amparar a sus hijos mayores de edad, indudablemente se halla motivada por los nuevos rasgos que exhibe la sociedad argentina. Entre ellos pueden citarse: las escasas posibilidades que brinda el mercado laboral para obtener un trabajo que permita proyectar, en el largo plazo, la estabilidad personal y familiar; las complejidades para acceder a un lugar donde vivir; el tardío o postergado abandono de la casa paterna por parte de los hijos; el retorno de los jóvenes al hogar familiar luego de haber experimentado la residencia independiente; etcétera.
Respuestas a un reclamo actual
Agustín Torres, abogado e investigador en Ciencias Sociales de la UNT.